Fue uno de los nueve estudiantes seleccionados en todo el país. Durante un año se formará en Alemania, donde continuará desarrollando un proyecto tecnológico aplicado al sector agropecuario.
Federico Beck, estudiante de 25 años que cursa el quinto año de Ingeniería Electrónica en la Facultad Regional San Francisco de la UTN, fue uno de los nueve seleccionados en todo el país para participar del Programa de Intercambio Académico UTN-DAAD 2025, impulsado por la Universidad Tecnológica Nacional junto al Servicio Alemán de Intercambio Académico (DAAD). A partir de esta beca de movilidad estudiantil, que cubre todos los gastos de traslado y estadía por un año, viajará al país germano en los próximos días para permanecer allí hasta el 31 de julio de 2026.
Cabe destacar que en el programa de becas UTN-DAAD, el proceso de adjudicación tiene un periodo de dos años, en donde se deben atravesar cuatro etapas: Preselección, Evaluación de proyectos, Examen de idioma Alemán y Selección.
Beck ya había sido preseleccionado el año pasado, pero finalmente la oportunidad se concretó este año. El camino de preparación fue largo: comenzó a estudiar alemán en 2019, primero a través de los cursos gratuitos de la Facultad, y luego continuó en un instituto privado. “Fueron más de cinco años de estudio. Empecé por curiosidad y por mis raíces alemanas, pero después se fue transformando en una meta concreta”, reveló.
Un proyecto con impacto en el agro
En cuanto el proyecto que presentó Federico, combina sus conocimientos en electrónica con su vínculo familiar con el campo. Consiste en un collar inteligente para ganado vacuno que permite medir signos vitales de los animales, como la temperatura corporal, y anticipar etapas reproductivas. “En los grandes rebaños es muy difícil controlar animal por animal. La idea es que el collar emita datos en tiempo real a una base que se pueda consultar desde cualquier dispositivo móvil”, explicó.
El proyecto, todavía en etapa de investigación, se gestó en el grupo de investigación AC&ES-RG - Applied Control & Embedded Systems - Research Group de la Facultad, bajo la dirección del Ing. Emanuel Bernardi. “Ya venimos trabajando con dispositivos similares en otros desarrollos, así que este proyecto se alinea con nuestra experiencia”, resaltó Beck.
Alemania: estudio, investigación y nuevas experiencias
Durante el primer tramo de la beca, Federico realizará un curso intensivo del idioma. Luego, durante el semestre académico, cursará materias en la Universidad de Ilmenau, a partir de la recomendación de otros becarios de años anteriores.
“Me interesa mucho la parte de sistemas embebidos y la vinculación con grupos de investigación en inteligencia artificial. Hay muchas posibilidades para seguir aprendiendo, incluso dentro de empresas tecnológicas que están integradas al ecosistema universitario”, comentó.
En la segunda mitad del intercambio, podrá elegir entre seguir cursando, participar en grupos de investigación o realizar una experiencia laboral en Alemania. “Va a ser un gran desafío, pero también una oportunidad para salir de la burbuja académica y crecer profesionalmente”, dijo.
Compromiso con la formación y el regreso
Actualmente, Federico trabaja en la empresa MSF Tech (Maquinarias San Francisco), firma del rubro metalúrgico, donde comenzó con una pasantía y ya lleva dos años de experiencia: “Mis jefes me apoyaron mucho con esta decisión. Saben que va a ser una experiencia que me va a enriquecer”.
A pesar de las posibilidades que pueda abrirle esta beca en el exterior, tiene claro su objetivo: volver y terminar su carrera. “Me falta rendir algunas materias y cursar sexto año. La idea es regresar y recibirme. No quiero quedarme con la carrera incompleta”.
Con ansiedad y entusiasmo, Federico ya se prepara para este nuevo capítulo. “Quiero aprovechar al máximo esta oportunidad: mejorar el idioma, hacer contactos, conocer otra cultura… y traer todo ese aprendizaje de vuelta a casa”, concluyó.